Cumple 50 años la institución Educativa Juan Lozano y Lozano
Les compartidos este video de la banda institucional en conmemoración a los 50 años que cumplió nuestro Juan Lozano y Lozano en este año 2020
Créditos a Amanda perlita por el video
miércoles, 4 de noviembre de 2020
martes, 3 de noviembre de 2020
LABORES ESCOLARES: ¿CÓMO HACER MÁS FÁCIL EL MOMENTO?
LABORES ESCOLARES: ¿CÓMO HACER MÁS FÁCIL EL MOMENTO?
Seguramente has tenido momentos poco agradables con tus hijos al lidiar con el cumplimiento de sus labores escolares, pero hacer la tarea no tiene porqué ser un momento trágico. De hecho, puede ser muy divertido.
Durante la etapa escolar, los niños empiezan a adquirir responsabilidades académicas importantes y necesarias para su crecimiento y desarrollo cognitivo. Esta etapa requiere de la presencia activa de los padres para inculcar buenos hábitos de estudio que hagan más sencillo y divertido el momento de hacer las tareas.
Muchas veces se suele culpar a distractores como el televisor, videojuegos y las nuevas tecnologías como los enemigos principales de que el niño no cumpla con sus labores. Sin embargo, la mayoría de las veces los verdaderos culpables son la desmotivación, la falta de atención y tiempo limitado de los padres, los malos hábitos e incluso el cansancio.
Que tu hijo disfrute el momento de hacer la tarea, en gran medida depende de ti. Por eso, te contamos algunas herramientas para no fallar en el intento y lograr un mejor desempeño académico en tus niños.
1. Crea buenos hábitos de estudio. Es importante que desde temprana edad le enseñes a formar hábitos de estudio. Repeticiones diarias, paciencia y establecer rutinas en las que se incluya esta actividad, son elementos necesarios para que tu hijo aprenda la importancia de cumplir con sus obligaciones diariamente.
2. Escoge el mejor momento. Algunas veces los padres intentan que el niño realice sus tareas apenas regresa del colegio, pero los expertos señalan que en la mayoría de los casos los niños llegan agotados mentalmente como para estudiar. Por eso, recomiendan tener un tiempo luego de la escuela para descansar y así después de que se levanten tendrán más energía y ánimo para estudiar.
3. Muestra interés en sus actividades. Sin duda, tus hijos se sienten más motivados a hacer sus tareas y mejorar su desempeño cuando tienen a alguien que se interesa, que los felicita cuando lo hacen bien y les anima a hacerlo mejor cuando no obtienen tan buenos resultados. Preguntarles cómo les fue, qué hicieron, qué tienen para el día siguiente. Estas son preguntas que no pueden faltar en la conversación con tus hijos luego de las clases.
4. Crea un espacio ideal para el momento de estudiar. El ambiente en el que los niños realizan las actividades es fundamental. Por eso, los expertos aconsejan brindar espacios con la iluminación adecuada, los materiales necesarios y buena ventilación, donde se puedan concentrar.
5. Busca formas divertidas de fomentar su aprendizaje. Actualmente, tenemos a nuestra disposición miles de herramientas didácticas que nos ayudan a hacer más divertido el momento de estudiar con nuestros hijos. Portales educativos como Mundo Primaria o Educapeques son ideales para que aprenda mientras se divierte.
6. No prolongues sus actividades. El mayor error de los padres es tener a un niño sentado por horas sin terminar la asignación. Esto hace que su labor sea aburrida e interminable. Establece un límite de tiempo para cumplir con la tarea de acuerdo a su complejidad. Ten presente que luego de 45 minutos no tendrá la misma atención. En este momento, puedes darle un tiempo de receso o tomar la merienda, si es su hora, para luego continuar con la actividad.
lunes, 2 de noviembre de 2020
Una educación hacia el ser humano del futuro
Una educación hacia el ser humano del
futuro
La pregunta
central que tiene que contestar cualquier propuesta educativa es: ¿Para qué
preparamos a las nuevas generaciones? Y para contestar esta pregunta la
propuesta se basa explícita o implícitamente en un concepto del ser humano.
Si el principal
objetivo de la educación es preparar a los niños y jóvenes para integrarse a un
mundo económico en el cual predomina la competencia brutal, en donde una
minoría pequeña ni sabe que hacer con sus riquezas, mientras que la mayoría
lucha para sobrevivir el siguiente día. Si este es el objetivo principal de la
educación entonces se tiene un concepto del ser humano como máquina, como
animal, a lo mejor racional, movido únicamente por instintos y formado
pasivamente por su entorno, por la supuesta realidad uniforme. Esta forma de
educación se basa en una visión racionalista o positivista, en una psicología
conductista, que niega todo mundo interno del ser humano.
Si el principal
objetivo de la educación es preparar a los niños y jóvenes para que aprendan
nuestros valores, nuestras conductas, nuestras formas de vida. Si este es el
objetivo principal de la educación entonces se tiene un concepto que niega lo
histórico del ser humano. Se intenta reproducir un pasado que ya no existe en
el mundo de hoy, se trata de imponer valores y modelos que ya no sirven en un
mundo de cambios acelerados, se niega la dialéctica de generaciones.
Diálogo nacional por la educación pública y la paz
Diálogo nacional por la educación pública y la paz
Foto: Roberto Verzo
Anoche me pareció haber
leído el encabezado de un diario de Michoacán que decía más o menos lo
siguiente: Maestros con movilización, pretenden impedir la evaluación, yo no
creo que eso sea posible por ahora, pero sí considero que es urgente convocar a
un gran Diálogo Nacional por la Educación Pública y la Paz. Trataré de
explicar:
La convocatoria sería de
los ciudadanos para los ciudadanos. Un gran diálogo nacional evitaría que la
crisis del Sistema Educativo Nacional destruya todo lo que hemos construido a
lo largo de más de un siglo con los aportes de varias generaciones de
educadores y las aspiraciones de los estudiantes de hacer de la educación
pública una palanca del desarrollo nacional.
La educación pública es ya
un espacio de disputa de distintos intereses legítimos o no y por este motivo,
solo por este si no hubiera otros, es de urgente necesidad la revisión de la
política educativa nacional en el marco de un diálogo que supere los
acartonados e inútiles foros partidarios o del gobierno en turno. La política
educativa debe dejar de ser un asunto unilateral del gobierno o de las
burocracias de recambio sexenal, para dar paso a un diálogo de los educadores
de estudio con la sociedad.
